Buenos días:

Os presento el adorno central de mi mesa este año, que reúne la esencia de una actitud positiva estas fechas: se trata de una revista de publicidad para comprar, comprar y comprar, reconvertida por la creatividad del origami en un abeto. Tomamos lo que hay y lo transformamos en lo más positivo y bello posible.


Porque ya estamos a las puertas de la Navidad. 

¿Qué suponen estas fiestas para ti? 
¿Las vives a gusto y feliz, o con enfado o tristeza o desgana? ¿Cuáles son las emociones dominantes?
¿Te gustaría poder hibernar y despertar el día 7 de enero? 



Espero que  te resulten útiles este post y el siguiente, donde detallaremos un plan para asimilar el enfado y transformarlo en una nueva manera de crecimiento personal. 


A algunas personas les gustaría no atender los compromisos familiares y sociales de estas fechas, si bien a la hora de la verdad pocas se atreven a plantarse y a buscar una alternativa.  

La Navidad nos puede servir de termómetro familiar


Si tu familia fuera un ecosistema, ¿cuál sería? ¿Acaso una selva frondosa, un campo de cultivo repleto y ordenado, un desierto abandonado…? ¿Cuál sería tu papel?


¿Cómo son tus relaciones con tus familiares? ¿Con quiénes te llevas bien y con quiénes no soportas estar?


 Una propuesta: si te tomas las reuniones familiares como un aprendizaje y ves en los demás tu propio espejo… ¿qué partes de tu interior necesitan una reforma? Es decir: si acusas a alguien de obtuso/a, ¿Qué tienes tú de ello? ¿Encontrarías un ejemplo en tu vida de una actitud semejante? 


¿Quiénes faltan y cómo llevamos el duelo? 
¿De qué manera podemos dar un homenaje sano a aquellas personas amadas que han fallecido? ¿Cómo enseñamos a las generaciones que vienen, a niños y a niñas, la muerte, las despedidas y los ciclos?


¿Cómo está tu capacidad de disfrute? ¿Buscas el lado soleado de la vida o te quejas?

¿Y cómo está tu capacidad de amar y de perdonar? 



Nuestra familia nos da raíces y un punto de partida para volar, caminar o despeñarnos. 


Si miramos con amor a nuestros tatarabuelos, bisabuelas, abuelos y abuelas, padres y madres, podemos encontrar un patrón que nos une a través de los lazos de la sangre y de la genética. Podemos ayudar a sanar a nuestra familia, redimir la infelicidad de generaciones anteriores, aspirar a mayor dicha en este año 2014 que asoma ya. 


Tratando de ser más feliz tú aquí y ahora, y poniendo tu contribución en forma de pequeño acto para  que los/as demás también lo sean.



Entradas relacionadas:

Creatividad:– Metáfora:– Técnica aplicada a la resolución de problemas (incluye vídeos).

pensamiento positivo

Pensamientos parásitos (con comentario navideño)
La Navidad es inocente





Un abrazo:

Virginia Castanedo


Creatividad, Arteterapia y Educación emocional 
Sesiones individuales y grupales
Te escucho en hola@elcaminocreativo.com
679 664 693