Visita el perfil freelance de Virginia Castanedo en InfoLancer.net

Buenas tardes y bienhallada, bienhallado: 
 
Gracias por estar al otro lado, Nagore, tu comentario ha sido el revulsivo para volver a escribir, porque he estado dándole vueltas a las posibles respuestas a lo que has planteado, y lo que ayer eran ideas que revoloteaban hoy se están convirtiendo en algo tangible. Vamos a la tarea. 
 
Lo mismo que comenté en la entrada anterior sobre cómo fui cayendo en la desidia y en el abandono (momento en el que la Creatividad escapa por la ventana en espera de tiempos mejores), en esta voy a hablar de la posibilidad de recuperación paulatina. 
Si consigo autodisciplinarme en algo concreto, gano fuerzas y autonconfianza para dar un paso más en algo que antes no me atrevía. 
 

La osadía y la felicidad también son contagiosas

 

¿Y por dónde empezar? Pues por algo que te resulte sencillo, y se expandirá al resto de tu vida.

 
 Un ejemplo: tratemos de recuperar el equilibrio, por lo que es posible detectar varias carencias en mi desarrollo mental (ya no leo libros de sabios, por ejemplo), emocional (hago cosas que detesto y me obligo a ello) y corporal (he dejado de hacer los ejercicios de espalda y descuidado mi alimentación). 
 

Elijo algo concreto, puede ser que elimino una costumbre nociva (dejo los videojuegos) o añado una beneficiosa y satisfactoria (vuelvo a meditar, vuelvo a sacar fotos). 

 
Un autoanálisis sincero nos puede decir si tendemos a la pasividad y a la inacción o a la hiperactividad. En tus etapas de bloqueo, ¿dejas de hacer cosas que amas (y dejas de hacer en general)? ¿Pasas a la parálisis? En este caso, un pequeño impulso a hacer algo que siempre te ha gustado, aunque en ese momento no te apetezca, probablemente te abra la puerta a la recuperación y a volver a disfrutar.
 
 Si en cambio te dispersas, haces mil actividades, siempre estás con algo entre manos… Tal vez en este caso lo que es recomendable es parar, no hacer, y elegir. Si dudas porque no sabes decir que no, puedes hacerte una pregunta clave: Si sólo pudiera dedicarme el resto de mi vida a algo, ¿sería A o B? Y ya has elegido. Déjate aburrirte, descárgate, céntrate. Al aumentar el tiempo y la conciencia en algo que amo, soy más feliz, y quiero más actos, pensamientos, palabras, emociones… que me lleven a la felicidad. La vida se ensancha. 
 

Podemos aprovechar las crisis internas, el no saber qué hacer con nuestra vida, para dar un giro y plantearnos qué es lo que queremos una vez más. ¿Sigue sirviendo lo que queríamos antes? ¿En qué punto del camino estamos? O para comenzar a escribir lo que nos hacer felices, lo que queremos, hacer un listado de nuestro proyecto vital. Cuanto más trascendental sea la crisis, es decir, si dudamos de para qué estamos en este mundo, mejor podremos disgramar nuestros objetivos para volver a dar sentido a nuestra vida. Escribirlos nos ayuda en tiempos de dudas y de retrasos. 

 
Me he dado cuenta de que la mayoría de las personas estamos con los mismos pensamientos todo el tiempo. Y si esos pensamientos son negativos, como me estaba sucediendo a mí, ¿dónde queda espacio para el oxígeno, para la creatividad, para una solución en la que no había caído hasta ese momento?

¿Dónde puedo colocar una idea nueva? Primero tendré que revisar las creencias que tengo (representadas por los bloques en la imagen), y dedidir si me siguen sirviendo o me planteo un nuevo modo de pensar.

La entrada me está quedando muy larga, y que quedan cosas en el tintero, continúo en la próxima, que será pronto, lo prometo, sobre la recuperación del equilibrio.

Mientras, de tarea para quien quiera: ¿Te atreves a escribir todas tus creencias respecto a los grandes temas vitales? Por ejemplo, amor, profesión, familia, espíritu… 

Simplemente escribe de seguido todo lo que pienses sobre el tema, sea lo que sea. Déjalo reposar 24 horas, y vuelve a leerlo. En ese momento sí que puedes decidir con cuáles de tus creencias subconscientes te quedas y con cuáles no, y cuáles quieres incluir.

Un abrazo. 

Virginia Castanedo

Creatividad, Arteterapia y Educación emocional 
Sesiones individuales y grupales
Te escucho en hola@elcaminocreativo.com
679 664 693